Así como el circuito de festivales tiene sus propias controversias por las películas y los invitados que decide apoyar, la temporada de premios también genera muchos debates sobre los reconocimientos, los ganadores de la noche y los olvidados del año. Aunque mucho se habla del Oscar y cómo se decide quién gana, la ceremonia que más se ha encontrado con problemas es la de los Golden Globes, pues hace tiempo se reveló todo el sistema corrupto, racista, homofóbico y sexista que rodea su imagen. Lo que ahora se presenta como una verdadera sorpresa es que la asociación que otorgaba estos premios ya no existe, y ahora la responsabilidad de la transmisión y organización quedará en otras manos.

La Asociación de la Prensa Extranjera de Hollywood era una organización donde entraban los mejores periodistas y fotógrafos del medio y que llegó a contar con hasta 100 miembros alrededor del mundo. El grupo se creó en 1943 con la finalidad de llegar a más gente y promover más películas que sólo los éxitos estadounidenses que acaparaban las noticias, los periódicos y la televisión. Ellos mismos crearon el premio Golden Globe para lo mejor del cine y la televisión del año, y la primera ceremonia se llevó a cabo un año después de la fundación misma de la asociación.

Por años, los Golden Globes fueron considerados como la antesala del Oscar, y muchas veces se sabía quienes tenían más posibilidades de ganar en la gran ceremonia gracias a este evento. Como sucede con todos los premios en las artes, el público, los críticos y la propia prensa no siempre están de acuerdo con las figuras que se nominan o terminan ganando, y lo que siempre se repite es que muchas veces existen trabajos más impresionantes en cintas que simplemente no pueden ser tan populares. Hasta cierto punto, este tipo de conflictos son esperados, pero la asociación eventualmente se encontró en el centro de algo mucho más complejo.

Aunque los rumores persistieron por años, fueron movimientos como el de MeToo o Time's Up los que lograron abrir las puertas para que el público viera realmente cómo se manejan los hilos en Hollywood, y el panorama no es nada agradable. Acoso sexual, violaciones, chantaje, traiciones, homofobia, racismo y sexismo, parecen ser la triste norma en el medio y aunque muchas cosas han cambiado, a veces se debe destruir algo de raíz para comenzar de cero. Hace unos años, Brendan Fraser relató cómo había sido acosado sexualmente por Philip Berk, el entonces presidente de la asociación, y el año pasado se le nominó por La ballena / The Whale, y a pesar de ser el favorito de la temporada, el premio terminó en manos de Austin Butler por Elvis, con el actor de La Momia evitando por completo el evento.

De igual forma, se criticó mucho a la asociación cuando la cinta de El turista obtuvo una nominación a pesar de ser considerada de lo peor del año, y poco tiempo después se reveló que la productora había sobornado a los miembros con un viaje a Las Vegas y un concierto privado. Algo similar sucedió años más tarde, probando que no habían arreglado nada, cuando "Emily en París" se hizo de algunas nominaciones sobre otras series de mejor calidad como "I May Destroy You". Los premios incluso enfrentaron un boicot por la falta de representación y diversidad no sólo en los proyectos nominados, también en los miembros que aceptaban para votar.

Ahora las cosas dieron un giro sorprendente, pues Variety confirma la disolución inmediata de la Asociación de la Prensa Extranjera de Hollywood y el cambio de manos de la organización de los Golden Globes. Según el medio, los derechos de los premios fueron adquiridos por Dick Clark Productions y Eldridge Industries, quienes crearán la Golden Globe Foundation para mantener la tradición de caridad de la asociación. También se reveló que los 95 miembros de base votaron a favor de esta decisión, y ahora se presentan dos oportunidades para ellos ya sea que decidan quedarse bajo el nuevo régimen o que decidan abandonar llevándose un jugoso acuerdo económico.

En los últimos años, la membresía de la asociación aumentó a más de 300, quienes podrán seguir votando para la próxima entrega, pero sin ser considerados miembros de la asociación. De igual forma, los nuevos miembros no serán considerados empleados directos bajo el nuevo concepto de la compañía a la que llegan, pero los 95 que estaban de fijo todavía tienen la posibilidad de trabajar organizando material diverso para promover los premios o pueden retirarse con una indemnización de US$225,000, lo cual se percibe como un trato increíblemente generoso para una asociación que activamente ignoró a los creadores y artistas negros, latinos y asiáticos, mientras fomentaba la exigencia y distribución de regalos privados a cambio de votos.