El cineasta Juan Carlos Pérez Rulfo Aparicio, mejor conocido como Juan Carlos Rulfo, visitó la comisaría de Ucí, municipio de Motul, para continuar la filmación de su nuevo trabajo cinematográfico, Por los que se quedan, en el cual hablará del fenómeno de la migración en México. El director (hijo del escritor Juan Rulfo) dijo que eligió esta comunidad yucateca para su proyecto debido a los logros importantes de los migrantes para beneficiar a su comunidad. Yucatán fue tomado en cuenta porque es sabido que tiene fuerte presencia en Los Ángeles, Chicago y varias partes de Estados Unidos. “Conocí en Los Ángeles a una persona de Ucí, Isidro Tec Pinto”, comentó Rulfo. Tec Pinto es parte de las personas que contribuyeron económicamente a la reconstrucción de la iglesia de San Antonio de Padua, en Ucí. Anteriormente sólo existía el presbiterio. El cineasta filmó, entre otras cosas, los conflictos que surgieron entre la población por esta obra, pues no todos estuvieron de acuerdo con el resultado final. “Así se dieron las cosas e Isidro nos quiso mostrar la relación que hay entre la gente que viaja al extranjero y su pueblo natal”, explicó Rulfo. “En los puntos más extremos y remotos del país existe un gran fenómeno que tiene que ver con los pequeños o grandes desarrollos llevados al cabo con el apoyo de los que se fueron para los que se quedan”, agregó el creador de la película En el hoyo. “Abordé el tema de los emigrantes porque estamos en el siglo de ellos, es el tiempo de migración en el mundo y México es el máximo exportador de mano de obra. Definitivamente es un tema para hacer una película”, agregó. “El filme no es tanto sobre las personas, sino sobre lo que pasa en el país con esta cultura que ya se estableció, es un poco de la contemporaneidad del país por el momento en que se encuentra”. La película lleva seis meses de filmación, aunque todavía falta un año de rodaje. Se realiza con el financiamiento de una fundación cultural, Bancomer y Sony. Entre los trabajos que ha realizado Juan Carlos Rulfo se encuentra el largometraje Del olvido al no me acuerdo (1999), una historia sobre los viejos cuenteros del sur de Jalisco, relatos alrededor de las familias, pero siempre desde el punto de vista del olvido y la memoria de las cosas que se van. Sin embargo, la producción que consiguió que los ojos de la crítica internacional se fijaran en él fue En el hoyo (2006), un documental sobre los trabajadores que construyeron el segundo piso del periférico de la metrópoli. Este trabajo ya ha recibido 23 distinciones en distintos festivales fílmicos.