Más de 400 profesionales venidos de toda Europa asistieron el viernes 6 de julio a la presentación del proyecto de investigación sobre "El impacto de la cláusula de territorialización de las ayudas estatales para el sector audiovisual", presentado por la oficina de investigación Cambridge Econometrics. Los profesionales presentes rechazaron de forma unánime las conclusiones de este estudio ante la evidencia de importantes errores metodológicos, la falta de claridad en lo referente a la recogida de datos y las dudas con respecto a las fuentes. En nombre de la European Film Agency Directors (EFAD), Roland Teichmann expresó la inquietud de las agencias nacionales del audiovisual en los Estados miembros de la Unión. Interrogado por Cineuropa, Teichmann declaró que "el estudio no podía dar lugar, en ningún caso, a conclusiones pertinentes sobre la eficacia de la cláusula de territorialización". Jean Cazès, en nombre del Club de Productores Europeos, recordó que las ayudas estatales más ineficaces fueron aquellas que no tenían cláusula de territorialización, el Sales & Lease Back inglés y el sistema de crédito de impuestos alemán en vigor desde hace algunos años y bajo cuyo efecto han sido transferidos varios millones de euros a las producciones hollywoodienses. Sin embargo, estas ayudas han sido abolidas. Fue la intervención del realizador Istvan Szabo (en la foto) la que más removió las conciencias: "si la industria audiovisual no puede beneficiarse de los impuestos de los ciudadanos, la cultura morirá. La ausencia de cultura nacional se transforma en fuerza política, y esta fuerza política se vuelve antieuropea. ¿Se han preguntado por qué algunos países rechazaron la Constitución Europea? Porque la población sintió que su cultura peligraba". Se debe recordar que las ayudas destinadas al cine son gestionadas por la Comunicación del Cine de septiembre de 2001. Esta comunicación estará vigente hasta finales de 2009. La comunicación establece que "las ayudas destinadas a promover la cultura y la conservación del patrimonio, cuando no alteran las condiciones de los intercambios y de la competencia en la Comunidad de manera contraria al interés común, pueden ser consideradas como "compatibles con el mercado común". La cláusula de territorialización es susceptible, según la Comisión, de provocar eventuales distorsiones en la competencia, así como una fragmentación indebida del mercado audiovisual (obstaculizando las coproducciones). El estudio encargado por la comisión tiene por objetivo proporcionar respuesta a esta problemática. Los encargados del estudio deberán tener en cuenta las intervenciones de los profesionales y remitir un informe final de aquí a finales de 2007.