El veterano dramaturgo y director de cine venezolano Román Chalbaud falleció este martes en Caracas a los 91 años de edad, informó hoy el ministro de Cultura del país, Ernesto Villegas, sin precisar la causa de la muerte.
Caracas, 12 sep (EFE).- El veterano dramaturgo y director de cine venezolano Román Chalbaud falleció este martes en Caracas a los 91 años de edad, informó hoy el ministro de Cultura del país, Ernesto Villegas, sin precisar la causa de la muerte.
"Me confirman desde Caracas que el maestro Román Chalbaud, prolífico cineasta, dramaturgo, poeta y mejor ser humano, acaba de partir a la eternidad en su apartamento de San Bernardino (una zona de Caracas)", escribió el ministro en la red social X (antes Twitter), donde expresó su pesar por el fallecimiento del artista.
El funcionario aseguró que Chalbaud fue el "cineasta más longevo en actividad de la historia del cine mundial, pues hasta hace poco, con 90 años, dirigió algunas escenas del rodaje de su última película, Muñequita linda, donde recibió apoyo de sus compañeros y discípulos del cine venezolano".
"Con sobrados méritos, entra al panteón de los más insignes hijos de esta patria habiendo sido por décadas encarnación de lo afirmativo venezolano", agregó Villegas, quien envió sus condolencias a los familiares y "seres más queridos" de Chalbaud, en nombre del mandatario Nicolás Maduro y de los trabajadores de la cartera de Cultura.
Chalbaud, quien nació en el estado Mérida, el 10 de octubre de 1931, fue presidente del Instituto Latinoamericano de Teatro (ILAT), fundador del "Nuevo Grupo" y ha sido laureado con los premios nacionales venezolanos de Teatro (1984) y de Cine (1990).
El cineasta, creador de películas emblemáticas como El pez que fuma (1977) y Cangrejo (1982), presentó en 2011 en Pekín su filme Días de poder, que refleja los cambios sociopolíticos del país caribeño en los años 50 a partir de la rivalidad entre un padre y su hijo.
En una entrevista con EFE en 1997, Chalbaud reconoció la influencia que tuvo sobre él el director español Luis Buñuel al mostrarle que el cine no solo era diversión, sino que también se trataba de un lenguaje con el que se podían decir cosas serias. EFE