Donna, una madre independiente y soltera, dueña de un pequeño hotel en una idílica isla griega, está a punto de dejar que se marche Sophie, la hija a la que ha criado sola. Donna ha invitado a sus dos mejores amigas a la boda de su hija: Rosie, una mujer práctica y lógica; y Tanya, rica y multidivorciada. Las dos son ex miembros de su antigua banda, Donna and the Dynamos. Por su parte, Sophie también ha hecho tres invitaciones muy especiales. Decidida a encontrar un padre para que la lleve al altar, invita a tres hombres que visitaron la paradisíaca isla hace 20 años. Durante las siguientes caóticas y mágicas 24 horas, florecerán nuevos amores y se reavivarán viejos romances en una isla llena de posibilidades.
REFERENCIA
La historia de Mamma Mía! (Mamma Mia! The Movie, 2008) empezó en los años 80, cuando la productora Judy Craymer trabajaba con Benny Andersson y Björn Ulvaeus –los que habían escrito “Dancing Queen”, una de las más recordadas canciones del grupo sueco ABBA- en calidad de productora ejecutiva de “Chess”, su primer proyecto después de la disolución del grupo. Inspirada por la teatralidad de sus canciones, decidió crear un musical que incorporase canciones de ABBA dentro de un formato nuevo y original. El detonante fue una canción en especial, “The Winner Takes It All”, cantada en la película por Meryl Streep. Fue la canción más desgarradora de ABBA, y la última que llegó a la lista de las Diez Mejores Canciones en Estados Unidos.
A pesar de que Judy Craymer les aseguró que no sería un tributo a ABBA ni la historia de la banda, Benny Andersson y Björn Ulvaeus eran reacios al proyecto. Tardó años en convencerles, pero por fin aceptaron, siempre y cuando la historia fuera lo bastante buena como para incluir las canciones.
En 1997 Craymer conoció a la dramaturga Catherine Johnson, y pensó que tenía el talento y la sensibilidad necesaria para escribir el musical. La productora le explicó a la escritora que las canciones de ABBA se dividían en dos grupos: las canciones de juventud, más inocentes y ligeras, como “Honey, Honey” y “Dancing Queen”, y las canciones de la segunda etapa, más maduras y emotivas, como “The Winner Takes It All” y “Knowing Me, Knowing You”. Judy Craymer estaba convencida de que las canciones sugerían una historia que gustaría a varias generaciones. También le explicó a Catherine Johnson que las letras de Björn Ulvaeus sugerían bodas y vacaciones, pero que la historia debía funcionar sin las canciones.
Con el guión en la mano, Judy Craymer empezó a buscar un director. La respetada directora de teatro y de ópera Phyllida Lloyd no tuvo inconveniente en unirse a la aventura después de leer la obra. Dice: “Era el musical que Benny y Björn habían escrito sin darse cuenta”.
El estreno de "Mamma Mia!" tuvo lugar el 6 de abril de 1999 en el Prince Edward Theatre de Londres y fue el primero de una interminable lista de éxitos. Su estreno en Estados Unidos fue en noviembre de 2000 en el Orpheum Theatre de San Francisco. Llegó a Broadway en octubre de 2001, y la venta anticipada alcanzó los 27 millones de dólares, una de las cifras más elevadas de la historia del teatro. En 2002, el musical fue nominado a cinco Tony.
Poco después del estreno londinense, varias productoras mostraron su interés por adaptar “Mamma Mia!” a la gran pantalla. Playtone, la compañía de Tom Hanks y Gary Goetzman, se asoció con Littlestar (la productora de Judy Craymer) para producir la película. Pero Judy Craymer no tenía prisa en que el musical pasara a la gran pantalla. En 2003, después de que “Mamma Mia!” se hubiera estrenado en Europa, el continente americano, Australia y Asia, la productora supo que había llegado el momento y se puso en contacto con Playtone.
Phyllida Lloyd y Catherine Johnson estaban dispuestas a participar en el proyecto. La directora dice: “Me parece que ‘Mamma Mia!’ siempre fue una película. Transcurre en una isla mágica. La obra pedía a gritos pasar del escenario a la pantalla, y lo ha conseguido”.
Trasladar el musical a la pantalla ofrecía retos y ventajas. Por ejemplo, en la película se ha podido sacar la secuencia de “Dancing Queen” del dormitorio y llevar a las mujeres al puerto. También fue una nueva experiencia para la directora rodar en los estudios Pinewood de Londres, en el enorme plató 007, y en decorados naturales en Grecia. Para dominar el uso del espacio en la película, Phyllida Lloyd hizo una primera grabación con antiguos miembros del reparto teatral. “Lo hice para controlar las estructuras de las canciones y para saber si la coreografía debía rehacerse desde cero”, explica. “Filmé cámara en mano y decidí cuándo se movía la cámara y cuando no durante los números musicales”.
“Quería que el movimiento de la cámara fuera diferente para cada canción”, sigue diciendo. “Debía encajar con la trama. Y quería meterme dentro de las escenas porque siempre me había quedado fuera en el escenario. Me metí en medio de la secuencia de ‘Voulez-Vous’ para ofrecer el punto de vista de Sophie”.
Una vez escogido el equipo técnico, los cineastas empezaron a buscar un reparto a la altura del musical. Judy Craymer siempre había dicho que las canciones eran las protagonistas, pero cuando vio a las personas sentadas alrededor de la mesa para la primera lectura del guión, tuvo que morderse la lengua.
La incomparable Meryl Streep, premiada por la Academia, conocida por su versatilidad y considerada por muchos como una de las grandes actrices estadounidenses del momento, da vida a Donna. Mamma Mia! es su primera película musical, a pesar de haber cantado en películas como Postcards from the Edge (1990) y A Prairie Home Companion (2006).
“Soñábamos con que Meryl fuera Donna”, dice Phyllida Lloyd. “Sabíamos que cantaba y que quería hacer un musical. Era perfecta para el papel. Es una actriz increíble capaz de hacer reír o llorar a cualquiera. Exactamente lo que necesitaba Mamma Mia!”.
Meryl Streep se sintió atraída por el espíritu del personaje y, claro está, por la música. Meryl le había escrito una carta muy emotiva al equipo después de haber visto el musical en Broadway. También le gustó que fuera un musical y una película creada por mujeres. Sabía que el papel era muy físico y requería mucha energía. Entre otras cosas, canta “Mamma Mia” en un equilibrio precario desde un tejado después de trepar por una pared de diez metros. Tampoco se queda atrás con “Dancing Queen”, deslizándose por una barandilla y saltando al mar desde un malecón, entre otras cosas.
Guion: Catherine Johnson
Producción: Judy Craymer y Gary Goetzman
Fotografía: Haris Zambarloukos
Montaje: Lesley Walker
Música: Benny Andersson y Björn Ulvaeus; basada en las canciones de ABBA
Director de Arte: Maria Djurkovic
Intérpretes: Meryl Streep (Donna), Pierce Brosnan (Sam), Colin Firth (Harry), Stellan Skarsgård (Bill), Julie Walters (Rosie), Dominic Cooper (Sky), Amanda Seyfried (Sophie), Christine Baranski (Tanya)
Distribución: UIP