Antoine es enviado a Tánger para supervisar el establecimiento de un consorcio mediático. Va con el pretexto de encontrarse con Cécile, su antiguo amor. Hacía treinta años que se habían separado y no se habían vuelto a ver. Ella, que ha olvidado a Antoine, lleva una vida de casada en Marruecos, y su hijo, que vive en París, la visita de vez en cuando. Antoine, en cambio, jamás ha olvidado ni se ha recuperado de aquella separación. Ahora, sólo tiene una idea en su cabeza: reconquistar a Cécile.
REFERENCIA
André Téchiné (Valence d’Agen, 1943) pasó buena parte de su adolescencia provinciana viendo películas en el cine. Escribe sus primeros artículos en un periódico colegial, La Pluma et l’écran. Llegado a París, a los 20 años, aunque no tiene éxito para entrar al IDHEC, no obstante se integra a la redacción de los Cahiers du Cinéma: su primera crítica importante será sobre La peau douce, de François Truffaut. En 1965 rueda su primer cortometraje Les oiseaux anglais y en 1967 es asistente en el film Les idoles.
Téchiné escoge a Bulle Ogier para ser la heroína de su primer largometraje, Paulina s’en va, que fue presentado en Venecia en 1969, una obra onírica que desconcierta a los espectadores, por cuanto su estreno definitivo en salas comerciales será seis años después. De factura mucho más clásica, su segundo film, Souvenirs d’en France (1975), con Jeanne Moreau, por el contrario, recibe una calurosa acogida, al igual que Barocco (1976), policial de estética expresionista, que reúne a Isabelle Adjani y Gérard Depardieu. Su siguiente obra es un sueño largamente deseado, Les soeurs Brontë (1979), pero a pesar del gran presupuesto y del casting prestigioso (Isabelle Adjani, Marie-France Pisier, Isabelle Hupper), este austero film de época no convence mucho.
Estrenado en 1981, el melancólico Hôtel des Amériques marca un cambio en la carrera de Téchiné, pues sitúa, de ahora en adelante, su gusto por lo novelesco en un universo más realista. En este film, dirige por primera vez a Catherine Deneuve, su actriz-fetiche, a la que dará inolvidables papeles de mujeres a la vez voluntariosas y vulnerables como en Le lieu du crime (1986). Volverá a trabajar con la Deneuve en Ma saison préférée (1993), Les voleurs (1996) y más recientemente en Les temps qui changent (2004).
Téchiné vuelve al primer plano en 1985 con Rendez-vous, que le reporta el Premio a la Mejor puesta en escena en el Festival de Cannes y que cuenta con una reveladora actuación de Juliette Binoche. Después de J’embrasse pas (1991), nuevo retrato de una joven provinciana atormentada, Téchiné realiza uno de sus más grandes éxitos de público y crítica, Ma saison préférée, presentado en la Croisette en 1993. Sin embargo, Les roseaux sauvages (1994) es, para muchos, su mejor film, un hermoso relato acerca de tres jóvenes que se inician en el sexo a comienzos de la década de los 60, teniendo como fondo la guerra de Argelia.
A partir de entonces y fiel a ciertas temáticas (las relaciones familiares, la homosexualidad, el exilio) la obra siguiente de Téchiné se divide entre su voluntad de construir relatos complejos, como el film-puzzle Les voleurs, y una búsqueda de autenticidad, como el caso de Loin (2001), filmado en Marruecos con cámara DV. Descubridor de talentos (Elodie Bouchez, Lubna Azabal), también ha sido capaz de abarcar distintas épocas: Emmanuelle Béart atravesando la Francia ocupada en Les egarés (2003) y Deneuve-Depardieu reunidos en Tánger en 2004 en Les temps qui changent.
El Tánger multiétnico, con cientos de africanos clavando la mirada al otro lado del Estrecho -España-, es el escenario de ese reencuentro. "Tánger representa al mundo cambiante, esa zona sísmica, cultural y política, a las puertas del paraíso europeo", explicó Techiné.
Por su parte, la actriz ha dicho con respecto a los personajes protagonistas que: "Las mujeres y los hombres entienden el amor de manera distinta. Para la mujer, el amor es esencial en su vida, un permanente intento de hacer congeniar la vida profesional y la sentimental. Para el hombre, el amor es algo que está bien, si funciona, pero no es lo fundamental".
En Les temps qui changent, el reparto se invierte. "Gerard es el reflejo de una obsesión enfermiza", un personaje "casi femenino", mientras que Cécile es una mujer glacial y de comportamiento hasta viril, en la que Deneuve reconoce "hay buena parte de mí".
"Opté por una cámara ligera, móvil, para reflejar los desórdenes de la vida, acercarme a la trayectoria de los personajes y captar sus rostros lo más cerca posible", afirmó Téchiné. "Es un filme sobre el caos de la vida".
Premios
- Festival de Berlín: Selección a concurso
- Premios César: Nominada a Mejor revelación masculina (Zidi)
Guion: A. Téchiné, Laurent Guyot, Pascal Bonitzer
Producción: Paulo Branco
Fotografía: Julián Hirsh
Montaje: Martine Giordano
Música: Juliette Garrigues
Intérpretes: Catherine Deneuve, Géard Depardieu, Gilbert Melki, Lubna Azabal, Malik Zidi, Tanya Lopert, Jabir Elomri, Nabila Baraka, Nadem Rachati
Distribución: Gran Cine