DIRECTOR

Diego Rísquez.

La vida del cantante Felipe Pirela, “El bolerista de América”, desde que la inspiración y el camino de la música se abrieron en una emisora de radio en su Maracaibo natal, hasta conquistar los mercados y plazas internacionales. En medio de ello, el encuentro con el amor de su vida, una niña, un sueño de felicidad imposible. 

Luego de recrear la figura de uno de los más grande pintores de las artes plásticas venezolanas, en su film Reverón (2011), el realizador Diego Rísquez continúa por el mismo sendero esta vez aproximándose a la del considerado “El bolerista de América”, el cantante Felipe Pirela (Maracaibo, 1941 – San Juan de Puerto Rico, 1972), abarcando su vida artística desde sus comienzos en su natal Maracaibo, hasta su asesinato en Puerto Rico, luego de haber alcanzado la fama en toda Latinoamérica.  

La figura de este artista maracucho ya había sido el tema central del documental La vida es un bolero. Felipe Pirela, el bolerista de América, dirigido por Milagros Rodríguez en 2002. Ahora, por primera vez, el cantante es abordado por Rísquez en una cinta de ficción en la cual el personaje es encarnado por el joven cantante Jesús "Chino" Miranda, integrante del famoso dúo “Chino y Nacho”, una elección que para muchos, en principio, sorprendió debido a las diferencias físicas y vocales de "Chino" con respecto a Pirela, además de su inexperiencia como actor. 

"Independientemente de que el actor que lo hiciera se pareciera a Pirela o no, lo más importante para mí era que cantara. A mí no me interesaba doblar a Pirela (...). Hablé con "El Chino" por teléfono y, a partir de ahí, empezó una historia de un año y medio y después llegó la señorita Sheila Monterola como un torbellino y realmente fue maravilloso", cuenta el realizador. 

La película es una producción de Producciones Guakamaya, Centro Nacional de Cinematográfia (CNAC), Pedro Mezquita, Xenon Films, Ron Santa Teresa y la Gobernación del Estado Zulia.

De El malquerido, Rísquez destaca que es su primera obra que retrata la historia de un héroe popular. "Yo siempre había hablado de las élites. Reverón era de la élite de la pintura; Francisco (de Miranda) y Manuela (Sáenz) eran de la élite de la Independencia, pero en esta caso me acerqué a un personaje regional que se desarrolla en ese universo que es Maracaibo, que es "La Chinita", que es la pelota, que es Luis Aparicio, que es la plaza Baralt". 

No obstante, a pesar de ser una biografía, el realizador advierte que: "La película tiene elementos de ficción. No pretendo hacer un documental. El cine que yo hago no es un cine evidente, es un cine sugerente. Existe una historia principal, pero siempre existen subtramas donde yo dejo que el espectador saque sus propias conclusiones". 

Fuente: http://www.eluniversal.com/

Premios

• Festival del Cine Venezolano de Mérida: 12 premios, incluyendo Mejor película, dirección y Premio del Público
• Premios Municpales de Cine del Municipio Bolivariano Libertador, Caracas: 4 premios, incluyendo Mejor película