DIRECTOR

Luis Carlos Hueck

Julissa es magallanera a muerte, como su papá, y Andrés es caraquista de pura cepa. El estadio los une pero las mentiras, para que el otro crea que pertenecen al mismo equipo, ¿podrían separarlos?

Egresado Universidad Metropolitana en Administración de Empresas, el cineasta venezolano Luis Carlos Hueck es director y fundador de la productora audiovisual Escotilla Films. Cuenta también con cursos de dirección y producción de cine en la Universidad de California (UCLA).

Luego de trabajar como actor y/o editor en los cortometrajes [YBI-173] (2004), Rosas de color rosa (2007), La nochebuena de Paco y Manolo (2009) y Rift (2011), Huck se lanza a la realización de su primer largometraje, Papita, maní, tostón (2013), una comedia romántica ambientada en el mundo del béisbol, el deporte más popular de Venezuela, elemento que no obstante ha estado ausente prácticamente del cine de ficción nacional, por lo que la cinta se puede considerar la primera película arguemntal que tiene como telón de fondo la pasión beisbolera a la venezolana, cuya característica fundamental es la popular rivalidad de dos equipos: Navegantes del Magallanes y Leones del Caracas.

En la cinta, ambos protagonistas, interpretados por los debutantes Juliette Pardau y Jean Pierre Agostini, son fanáticos de bandos contrarios: ella es magallanera, él es caraquista.

El cineasta cuenta el origen del film: “La idea nace de hacer algo fresco y algo más parecido a nosotros, vemos muchas películas de afuera que no tienen nada que ver con nosotros, quise hacer algo totalmente nuestro, algo que disfrutemos todos los venezolanos al vernos reflejados en los personajes de la película. ¡Además, soy mega Caraquista y como dicen por allí nada como un Caracas-Magallanes!”.

La película contó con el apoyo del Centro Nacional Autónomo de Cinematografía (CNAC) y se rodó ininterrumpidamente a lo largo de 7 semanas entre julio y agosto de 2012, para luego esperar el arranque de la temporada de béisbol (que en Venezuela dura de octubre a enero) para filmar las escenas pertenecientes a los verdaderos juegos del Caracas-Magallanes.

Huck cuenta lo difícil que resultó el rodaje de estas escenas en el Estadio Universitario de la Universidad Central de Venezuela durante los juegos en vivo debido a que “la gente se asomaba a la cámara y saludaba, pensaban que era una cámara de noticias o algo así, entonces teníamos que repetir la escena una y otra vez, también teníamos que ser muy rápidos para así no molestar a los fanáticos”.

(Declaraciones de Luis Carlos Hueck tomadas de: http://venemetraje.net.ve/)