La precuela de "Toy Story" no se proyectará en territorios de Oriente Próximo y Asia. Hace unos meses la secuencia se había cortado hasta que estalló el escándalo de las leyes anti LGTBI en Florida y la productora Pixar la recuperó. El lanzamiento en China está en el aire
Lightyear se ha convertido en un campo de batalla para los derechos LGTBI. Su estreno mundial ya no será mundial. Esta precuela del mundo Toy Story (un universo fílmico que arrancó hace 27 años), que se lanza en los distintos territorios —en la industria del cine no hay países, sino territorios, que no coinciden exactamente con las naciones— entre mañana miércoles y el viernes 17, no podrá verse en países de Oriente Próximo como Kuwait o Emiratos Árabes Unidos (EAU) ni tampoco en otros de Asia como Malasia.
Pixar y su casa madre, Disney, ni siquiera la habían presentado ante la censura de Arabia Saudí, a sabiendas de que no obtendría el visto bueno allí, pero según Variety sí había pasado una primera criba en EAU. Al final, 14 países de Oriente Próximo y Asia, entre los que además de los mencionados se incluyen Indonesia, Egipto o Líbano, han prohibido que se proyecte la película en sus cines por incluir un beso de una pareja del mismo sexo. Y el estreno en China, uno de los mayores mercados cinematográficos del mundo, está en el aire. En muchas de estas naciones la homosexualidad es considerada un crimen.
Esta secuencia fue una de las mencionadas hace tres meses por los animadores de Pixar cuando protestaron por la ley contra los derechos LGTBI en el Estado de Florida, a la que parecía plegarse Disney. Los trabajadores afirmaron en marzo que los ejecutivos de la empresa madre habían solicitado cortes de “casi cada momento de muestras de afecto gais” en las películas de Pixar sin importar las resistencias y protestas de los equipos creativos y de los directivos del estudio, comprado por el gigante del entretenimiento en 2006. “Nosotros en Pixar hemos sido testigos de cómo bellas historias, llenas de personajes diversos regresan de la revisión corporativa de Disney en una versión reducida a las migajas de lo que fueron”, señalaba el texto dirigido al consejero delegado de la empresa, Bob Chapek, quien llegó al cargo el año pasado, sustituyendo a Bob Iger.
Y en esas secuencias descartadas estaba el beso lésbico en Lightyear. Disney, que tiene seis parques temáticos en Florida, dio marcha atrás y lo recuperó. La empresa no había alterado la dinámica entre las dos, pero sí eliminado de la pantalla el beso entre las mujeres, de acuerdo con la revista Variety. Una amiga de Buzz Lightyear, una guardabosques espacial, se casa en pantalla con otra mujer, con la que tiene secuecias de pareja en las que se incluye un beso.
Además las autoridades chinas han pedido a Disney algunos cortos. La productora ha aclarado que todavía no ha recibido una respuesta definitiva por parte del gobierno de China, pero la censura de este país asiático ya ha rechazado en el pasado otras manifestaciones de homosexualidad en la pantalla. “No vamos a eliminar nada, especialmente algo tan importante como la relación amorosa e inspiradora que le muestra a Buzz lo que se está perdiendo por las decisiones que toma, así que eso no se eliminará”, dijo la productora Galyn Susman a Reuters en la alfombra roja del preestreno de la película, en Londres.
También dejó clara su opinión el actor Chris Evans, que da voz al protagonista Buzz Lightyear en sustitución de Tim Allen. El que hasta ahora ha sido el Capitán América ha calificado la situación de “frustrante”: “Es genial que seamos parte de algo que está dando pasos hacia adelante en la capacidad de inclusión social, pero es frustrante que todavía haya lugares que no están donde deberían estar”.
Aunque más allá de la frustración, desde Pixar se ha enviado un mensaje de tranquilidad, ya que, pese a la magnitud del mercado asiático, la taquilla china solo supuso un 3% de la recaudación mundial de Toy Story 4, que superó los mil millones de euros. Hace unos meses, Disney ya descartó estrenar Doctor Strange en el multiverso de la locura en varios países por el mismo motivo. Sin embargo, es la primera que se hace público este choque contra la censura.